(Agencia Prensa Armenia).- El periódico The Washington Post publicó el viernes 25 de septiembre un duro editorial titulado "No, esta es la verdad sobre la represión de Azerbaiyán".
El texto comienza relatando un hecho que sucedió durante la visita de la Primera Dama de Azerbaiyán,Mehriban Aliyeva, en París, en la exposición de una muestra de fotos titulada "Azerbaiyán, Tierra de la Tolerancia": "Un periodista preguntó si Azerbaiyán era realmente un lugar así, señalando que sus cárceles están llenas de presos políticos. '¿Cómo puedes decir eso?', respondió la Sra. Aliyeva con aspereza. 'No es cierto'. Instó al periodista a 'buscar la información correcta'.El reportero luego le pidió que comentara sobre el encarcelamiento de la activista de derechos humanos Leyla Yunus y la periodista Khadija Ismayilova. No hubo respuesta. La primera dama le dio la espalda, mientras que los guardias de seguridad empujaron al periodista y lo alejaron".
El editorial, cuyo título es una respuesta a Mehriban Aliyeva, pasa luego a recordar la resolución aprobada el 10 de septiembre por el Parlamento Europeo. "Declara que la situación de los derechos humanos en Azerbaiyán se ha 'deteriorado continuamente en los últimos años', con 'la creciente intimidación y represión' de los defensores de los derechos, periodistas y otras personas en la sociedad civil. 'Los manifestantes pacíficos tienen prohibido protestar en el centro de Bakú desde 2006", dice la resolución, y los periodistas están sujetos a 'intimidación continua y acoso', entre ellos Emin Milli, fundador de la cadena de noticias online Meydan TV, que ha recibido amenazas de muerte".
De acuerdo con el Parlamento Europeo, "Azerbaiyán ha sufrido el mayor descenso de la gobernabilidad democrática en toda Eurasia en los últimos diez años". Según The Washington Post, el presidente azerí, Ilham Aliyev, "ha creído durante mucho tiempo que podía reprimir la disidencia en el país mientras se defendía de las críticas del extranjero. Ha prodigado millones de dólares en estos esfuerzos. Más millones gastaron en Bakú como sede de los Juegos Europeos de este año, en la que los atletas ignoraron alegremente los abusos contra los derechos humanos".
En mayo, The Washington Post publicó una investigación en la que reveló que el gobierno de Azerbaiyán, a través de la compañía petrolera estatal del país, SOCAR, pagó viajes y una gran cantidad de dinero a diez congresistas estadounidenses en el año 2013, para que aprueben leyes que los beneficiaban.
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