El habla es, según los investigadores del Grupo de Bioinformática del IACS, la unidad de medida de la sociabilidad. Luis Giménez |
Estudio del sociotipo
Investigadores del Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud lanzan una encuesta a la población, cuyos resultados les ayudarán a avanzar en su estudio del sociotipo. Para ellos, la relación de las personas con el entorno más próximo determina también el grado de salud.
Hablar mucho es beneficioso para la salud, pero, ¡ojo!, quizá no sirva lo que hablamos a través del correo electrónico y las redes sociales. Para los investigadores del IACS, "las tecnologías de comunicación compiten con las relaciones personales porque quitan a estas mucho tiempo y,posiblemente, a largo plazo predominen los aspectos negativos de estas tecnologías". Otros estudios se llevan a cabo en relación a las repercusiones en la salud del uso de internet. "Y quizá un día estos estudios lleguen a contribuir a la mejora de la sociabilidad que las mismas TIC han mermado", opinan.
Y aunque la risa forma parte del sociotipo, "porque genera empatía y lazos de amistad intensos", el Grupo de Bioinformación del IACS centra su encuesta en el habla por cuestiones prácticas propias del estudio. Su investigación de los patrones que sigue la risa se ha mostrado capaz de clasificar las depresiones. En la actualidad, "la risa es un indicador importante para desvelar patologías psiquiátricas", cuenta la bióloga Raquel del Moral. La risa, destaca la investigadora, favorece las sinapsis, la comunicación entre nuestras neuronas. Y un dato curioso: su frecuencia sigue la proporción áurea.
bioinformación
¿Tiene amigos con los que contar y compartir problemas? ¿Se divierte y se ríe con los amigos? ¿Le consideran una persona habladora? ¿Le cuesta entenderse con su familia? ¿Cuánto tiempo dedica cada día a hablar con su familia?... Inusuales, pero atinadas, estas preguntas de la encuesta que ha lanzado a la población el Grupo de Investigación en Bioinformación del IACS (Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud) en su estudio del sociotipo humano en relación con la salud.
Pedro Marijuán, su coordinador, nos explica qué es el sociotipo: "Es la expresión de nuestra sociabilidad, el cómo nos relacionamos con nuestro entorno más próximo". Y el habla es, según estos investigadores, la unidad de medida de la sociabilidad. Así que "de cuánto hablamos y con quién depende también nuestra salud", defiende Marijuán.
Epidemia de soledad
La soledad es la antítesis de un sociotipo sano. Y, lamentablemente, esuno de los males de nuestro tiempo. Muchas personas viven solas y aisladas en poblaciones grandes. El biólogo e ingeniero Pedro Marijuán habla incluso de "epidemia de soledad". ¿Sus consecuencias?: "Depresión, aceleración de enfermedades neurodegenerativas, irritabilidad, trastornos del sueño y el apetito...". Total, que si hablamos mucho, ya que el habla es el núcleo del sociotipo, tenemos más probabilidades de estar sanos. Si no lo hacemos, el sociotipo se daña, allanando el terreno a las enfermedades.
Para Marijuán está claro: "La crisis del sociotipo la pasamos al fenotipo", que es la expresión de nuestros genes dependiendo de hábitos de vida y factores medioambientales. Genotipo, fenotipo y sociotipo son, para el investigador, esencia indisoluble de la naturaleza humana: "Hasta la mosca del vinagre cambia si la aíslas".
Robert Putnam, en su libro ‘Bowling Alone’, habla de cómo ha descendido la sociabilidad en los últimos treinta años. "No hay un único factor decisivo –dice Marijuán–, pero son causas de ello la televisión, los coches, las urbanizaciones..."; cambios en el estilo de vida que "han provocado un descenso de los índices de felicidad, han traído más divorcios, menos hijos, menos voluntarios...".
El Framingham Heart Study, que lleva 75 años observando a un grupo de residentes en Framingham (Massachusetts, EE. UU.), para el estudio de enfermedades cardiovasculares, arroja también datos elocuentes sobre las nefastas consecuencias del aislamiento para la salud. El científico Alex Pentland estudia en el Instituto Tecnológico de Massachusetts los flujos de comunicación en la empresa; ha creado el sociómetro que mide cuánto habla la gente en el trabajo y cómo ello repercute en su bienestar. Entre otros datos, Pentland ha comprobado que la presencia de mujeres en los grupos mejora los flujos de comunicación.
Aunque son pocos, otros investigadores se ocupan del sociotipo en el mundo. Pero a este ‘hermano joven’ del genotipo y el fenotipo le cuesta captar financiación y apoyos. "Son estudios que en Europa han tenido muy buena acogida, pero aún no se apuesta por ellos", lamenta Marijuán.
En España, con todas las dificultades que acarrea una investigación en la que no hay moléculas que buscar, la bióloga Raquel del Moral y el ingeniero Jorge Navarro dan, junto a Marijuán, pasos hacia adelante en su exploración del sociotipo. Han comprobado el alcance de la soledad a través de los datos del Servicio Municipal de Teleasistencia de Zaragoza, de cuyos demandantes el 92% viven solos.
En la Oficina del Mayor, han puesto en marcha el programa piloto ‘Nos gusta hablar’ y colaboran con los hospitales Miguel Servet y Clínico Lozano Blesa, con el biomatemático de la Universidad Complutense de Madrid Rafael Lahoz y con el psiquiatra Javier García Campayo. Así han comprobado cómo "lo que más estimula a la persona es ser aceptada por los demás, es decir, la sociabilidad".
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