Entre los comercios sancionados se encuentran hoteles, restaurantes, bares, pubs, boliches, balnearios, salas de juegos electrónicos, entre otros. Asimismo, cabe destacar que los procedimientos enmarcados en el Operativo Verano se desarrollan a lo largo y ancho del país, pero haciendo foco en las principales ciudades turísticas como Iguazú, Villa La Angostura, Bariloche, Calafate, Córdoba, Mendoza, Gualeguaychú, Las Grutas, Puerto Madryn, y las localidades de la Costa Atlántica, entre otras.
Es importante aclarar que estas clausuras no tomaron por sorpresa a los comerciantes, ya que la AIFP efectuó –al inicio de la temporada– campañas de difusión acerca de la importancia de cumplir con las normativas referentes a la emisión de facturas, ya sea en forma manual o con controladores fiscales, y la exhibición de la data fiscal y las consecuencias de su no cumplimiento.
Concretamente, los inspectores de la AFIP concurrieron en varias oportunidades a los establecimientos comerciales y verificaron la repetición de alguna o varias de las siguientes irregularidades: no emisión de ticket, factura; inexistencia de controladores fiscales ; inexistencia de talonarios de facturas; falta de inscripción ante la AFIP; código de autorización de impresión de facturas vencido; emisión de comanda sin emisión de ticket/factura; mercadería sin respaldo documental; emisión de comanda con emisión de ticket/factura.
En los casos de reincidencia se labraron hasta tres actas de infracción, procediéndose en última instancia a la sanción de clausura de los comercios por 1, 2 o 3 días, Esta medida fue avalada por la justicia, y en algunos casos la ha extendido en el tiempo.
Entre las mayores irregularidades detectadas figuran los notables altibajos en sus ventas declaradas, ya que cuando alguno de los inspectores permanece haciendo los controles de facturación las ventas suben exponencialmente, mientras que cuando no hay ningún agente de la AFIP la “facturación” se reduce casi a cero.
En gran parte de los comercios visitados se observó “maniobras” que intentan disimular la emisión de facturas con comprobantes valorizados muy similares a un ticket, pero sin ninguna validez fiscal, lo que conlleva al no tributo del impuesto sobre las ventas. Es importante aclarar que este accionar provoca graves perjuicios no sólo para el fisco, sino como dice habitualmente el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray: “Sin recaudación no hay Estado ni gobierno; sin recaudación el país se queda sin los fondos que dispone para poder financiar las prestaciones sociales básicas como la seguridad, la asignación universal por hijo, la salud y la educación de todos los argentinos”.
Además, este comportamiento perjudica a los clientes, atento que se les está cobrando un impuesto que en definitiva no ingresa al Fisco. La evasión impositiva además conlleva una práctica desleal respecto a la competencia.
El objetivo primordial de este tipo de operativos apunta a reforzar la obligación de todos los comerciantes de emitir los correspondientes comprobantes por sus ventas, y de los consumidores de exigir su factura, ya que la evasión es un delito que debemos combatir entre todos.
Con esta medidas, el Organismo pretende desalentar el uso de comandas, tan común en la actividad gastronómica, que se encuentra prohibida por la Resolución General AFIP N° 3330, ya que las mismas son utilizadas para confundir a los clientes y simular que se trata de tickets, perfeccionando de ese modo la maniobra de evasión tributaria.
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