A cuatro años de sancionada esta norma, que contó con la realización previa de más de 300 foros ciudadanos en los que se plasmaron las expresiones de los diferentes sectores representativos de la sociedad y el apoyo de amplias mayorías en Congreso nacional, la Corte Suprema ha dado una clara muestra de institucionalidad y respeto por la voluntad popular.
Celebramos fervientemente desde la Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires que se haya dado certidumbre final sobre la regulación del espacio radioeléctrico y se lo establezca definitivamente como bien de dominio público sobre el cual el Estado ejerce su soberanía.
A 30 años del retorno de la democracia, fijando límites a la concentración económica que lesiona los derechos de los ciudadanos, los poderes de la República han fortalecido enormemente a la participación democrática. Este avance en la construcción de una sociedad más libre, justa e igualitaria inaugura una nueva etapa en donde todos y todas nos sintamos artífices de un futuro común.
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