Curas en Opción por los Pobres repudiaron las “consignas violentas” del cacerolazo

Por Facundo de la Fuente, corresponsal de NOVA en Avellaneda.
El grupo Curas en la Opción por los Pobres presentaron un comunicado sobre el cacerolazo del pasado jueves 13 de septiembre donde mostraron su repudio por algunas “consignas violentas” que esgrimieron los manifestantes, en especial aquellas que pedían la muerte de la Presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, las que acusaban al Gobierno de ser una dictadura y la utilización de banderas nazis. Además, pidieron dejar de lado los reclamos basados en la propia comodidad y deseos.

El documento, al que adhirieron los miembros del Grupo de Curas en Opción por los Pobres de Avellaneda, consideró como “muy positivo” que la población se manifestara “para expresar acuerdos y desacuerdos”. Sin embargo, esa organización eclesiástica, criticó y llamó a evitar “toda manifestación violenta, desde banderas nazis hasta cánticos deseando la muerte de la Presidenta”. En ese sentido, señalaron: “Esas consignas desvirtúan toda propuesta o crítica que pretende ser constructiva”.

En otro pasaje del comunicado, los sacerdotes repudiaron el hecho de calificar como dictadura al Gobierno Nacional. Según expresaron, un régimen dictatorial “es algo muy diferente al modo actual de ejercicio del Gobierno”. Además, recalcaron la constitucionalidad del mandado de Fernández de Kirchner e hicieron énfasis en que este fue respaldado por el 54 por ciento de los votos en las últimas elecciones presidenciales.

Los Curas en Opción por los Pobres también se mostraron desconcertados por la confluencia, en la misma marcha, de las “más variadas críticas al gobierno”. De esta manera, según expresaron, “no quedó claro qué es lo que se propone o contra qué medida específica del gobierno se manifiestan. En esas condiciones, no es fácil el diálogo o el debate, ya que no se entiende qué aspecto se quiere resaltar o con cuál se quiere debatir”, aclararon.

Finalmente, en otro punto del texto firmado por el sacerdote Eduardo de la Serna, coordinador de la institución, se invitó a los organizadores de la pasada marcha y de las que próximamente planean “expresar públicamente una profesión de fe democrática para desalentar cualquier amago de actitud destituyente que siempre está sobrevolando en estos actos”.

Además, llamaron a dejar de lado “los reclamos preocupados únicamente por su propio bienestar, comodidad o deseos, y a mirar con equidad particularmente las medidas de gobierno o propuestas políticas que más beneficien a los pobres, teniendo en cuenta a los más desfavorecidos de la sociedad en la actual situación internacional y según las actuales posibilidades concretas”.