(U24) Cinco niñas, cuyas edades van de los 10 a los 17 años, y un adolescente de 18 fueron rescatados de un local de comidas del pueblo salteño Colonia Santa Rosa, del departamento Orán, donde eran obligados a prostituirse en los baños del lugar.
Durante el operativo fue detenida la dueña del negocio, Teresa Pavia (45 años), acusada de infringir la ley 26.364 contra la trata de personas, según publica el diario El Tribuno.
La investigación comenzó luego de que la Policía registrara "fugas" del hogar de niños y adolescentes de la zona.
“Las víctimas eran captadas por esa mujer, quien, aprovechándose del hambre, inmadurez, vulnerabilidad y estado de ánimo de estas personas, les ofrecía trabajo y luego las iniciaba en la prostitución”, indicaron fuentes policiales al diario salteño.
Las niñas rescatadas tienen 10, 12, 13, 15, 16 y 17 años. Dos de ellas son hijas de la dueña del local. También fue rescatado un adolescente de 18 años. Todos eran ocupados como "mozos", pero con la orden de “hacerles tomar bebidas a los clientes, besarlos, susurrales al oído, abrazarlos y dejarse tocar sus zonas íntimas hasta que los sujetos pidieran un "pase', para mantener relaciones sexuales con su acompañante, ya fuera niña o niño”, señalaron.
“Unas cervecitas más y vemos qué pasa”, era la frase que repetía constantemente Pavia a los hombres, la mayoría de ellos trabajadores rurales, cuando estos le solicitaban tener sexo con las chicas o chicos.
Pavia autorizaba los “pases” y se trasladaba junto con los clientes y los menores hacia un baño interno u otro externo, donde bloqueaba la entrada para que otros parroquianos no ingresaran mientras duraba el acto sexual.
Según publica El Tribuno, algunas niñas estaban en el lugar con sus familiares, quienes las "entregaban" a Pavia a cambio de alcohol.
La causa judicial está a cargo del juez Raúl Juan Reynoso, del Juzgado Federal 3 de Orán.
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